Friday, October 13, 2006

Dignidad de los indignos

Cada individuo se enfrenta a diario a los resultados de su interacción con el mundo. Esto nos iguala a todos. Pensemos ahora en la naturaleza de esa interacción. Uno de sus condicionantes puede ser el mismo mundo (¡qué diferencia nacer en una familia bien de Barcelona o en una familia pobre de Nueva Delhi!). Y otro, los rasgos del individuo. Porque resulta que en esto no todos somos iguales y de esa diferencia se derivan resultados.

Meditaba estas cosas en una repentina toma de conciencia de lo que significa que el "síndrome de Down" sea un supuesto para el aborto legal. Significa que, en el colegio, cuando un niño con síndrome de Down se sienta al lado de otro sin síndrome de Down ambos se diferencian en algo esencial: el primero es abortable según la ley. Evidentemente, de ahí se deriva un grado distinto de dignidad humana.

¿Y recordáis la Alemania nazi, cuando se inició el programa de eutanasia dirigido a las personas indignas de la vida?

5 comments:

Anonymous said...

Ya es un acierto plantear el diálogo como un grave problema de nuestros tiempos. Leo tu reflexión como un S.O.S lanzado con rabia. No es mala salida la de refugiarnos en el monologo ante tal dificultad. Pero entonces de doy cuenta de que de lo que estamos hablando es el dialogo oral. El monologo puede convertise facilmente en un dialogo escrito, en la medida en que mientras escribes tu idea, tus puntos de vista, nadie te interfiere y puedes combinarlo todo: abstraccion ,personalización, sensibilidad, claridad, control expresivo, sin "lineas transversales de argumentacion". Lo malo es que para que haya dialogo se necesita un receptor adecuado al otro lado, que no siempre es fácil. En cualquier caso el lema de "no buscar convencer ni ser convencido sino encointrar una respuesta satisfactoria" al tema de debate me parece una ley acponsejable para salir de la aporia planteada.- Odiseo

ananias said...

Odiseo: ¡dichosos los ojos!

Si por "nuestros tiempos" entiendes los últimos 4000 años -año arriba , año abajo-, estoy de acuerdo.

Ciertamente, nada como escribir para expresar con tranquilidad lo que se quiere, sin la interferencia de un inoportuno "no, pero si yo...".

Y ya en el mundo de lo escrito, ¿qué sería, por ejemplo, de este monólogo sobre el diálogo sin vuestras intervenciones posteriores? Sin el intercambio -de vez en cuando y entre personas que hayan hilado algún capullo-, ¡qué pobres serían los monólogos!

Así que vivan las respuestas satisfactorias.

Anonymous said...

Odiseo: Análisis muy acertado del diálogo escrito en el que todo se combina, al no haber interferencias. Es una maravillosa observación la del diálogo oral y escrito. He caido en la cuenta de que, efectivamente, en el rodar del lenguaje, diálogo se ha identificado con lo oral. Lo cual explica la histeroide comunicación actual. Verse las caras es un obstáculo invencible, casi tanto como pertenecer a un partido o a un periódico, Es una hipoteca difícil de superar. Es increible saber de antemano lo que cada periodista o diputado va a decir. Ignacio Sotelo dice que hay que desprenderse de Platón. Creo que, como siempre, son los platónicos los culpables, por haber convertido a Platón en TESIS ABSOLUTA. Furtwängler

Anonymous said...

Sigo la ronda en esta casilla sobre "Dignidad de los indignos"en la que, parece que entré indebidamente. Pero en ella me encuentro, ademas de con la autora del post ,con Furtwängler, gratisima sorpresa. Lo creia -a éste- maniatado, sin movimento, en las redes digitales adversas. Pero nuestro matrix -¿conoceis la pelicula?- nos permite reencontrarnos con facilidad en otros espacios. Parece que el "usuario anonimo Rafa" no ha se ha pasado por aqui. Respondo a Ananias. Esta vez con "nuestros tiempos" me referia no a los de hace 4.000 años o los que sean, sino a los presentes, por dos razones: por ser los que conozco y porque me da en la nariz que son los que están propiciando de manera singular el caos comunicativo al que estamos aludiendo . En cuanto a la superioridad de lo escrito sobre lo hablado que defendía aún se puede ir más lejos.

Anonymous said...

Me olvidé de firmar Odiseo. Odiseo